Datos:
Título del libro: En
algún lugar del mar más azul.
Autor: T.J. Klune.
Editorial: Crossbooks
ISBN: 9788408298137
Año de publicación:
2025.
Número de páginas: 544.
Sinopsis:
Una casa mágica. Un
pasado oscuro. Una citación que podría cambiarlo todo.
Arthur Parnassus es
feliz con la vida que construyó sobre las cenizas de su pasado. Es el director
de un orfanato en una peculiar y remota isla. Está acompañado por el amor de su
vida, Linus Baker, que solía ser un funcionario del Departamento de Jóvenes
Mágicos. Y juntos quieren adoptar a los seis niños mágicos y peligrosos que
viven allí.
El trabajo es arduo,
pero ama a estos niños con todo su corazón, y no va a permitir que sientan el
dolor y la soledad que él sufrió viviendo de pequeño en esa misma isla.
Sin embargo, cuando es
convocado para dar una declaración pública sobre su pasado, Arthur se verá en
el ojo de un huracán que amenaza con destruir el futuro de todos los seres
mágicos… y de su familia.
La llegada al orfanato
de un nuevo niño mágico, orgulloso de identificarse como monstruo, provocará
que Arthur se percate de que su familia se enfrenta a un momento crucial: o
bien crecerá gracias a su presencia, o se desmoronará por completo.
Bienvenidos otra vez a
la isla Marsyas. Esta es la historia de Arthur.
Mi opinión:
¡Sabadito feliz!
Y muy feliz, pues
entramos en el mes de noviembre, lo que nos va acercando a las fechas
navideñas. Y como me encantan dichas fechas, pues he decidido hablarles de un
libro que no solo me ha fascinado, sino que ha cambiado por completo mi
perspectiva con respecto a cierto tema. Pero no me adelantaré, desglosemos poco
a poco los más que bien ejecutados puntos de este libro.
La narrativa está en
tercera persona, solo que en esta ocasión, lo veremos todo desde la perspectiva
de Arthur Parnassus. Y me ha encantado, porque se nota el cambio en el narrador
con respecto al primer libro de esta bilogía. Porque aunque Arthur es un
personaje más crecido en esto de la empatía y la comprensión, también tiene
miedos muy distintos a los de Linus, sentimientos de incertidumbre que se verán
reflejados en esta narrativa, así como las descripciones de impotencia, dudas
existenciales y la fiereza con la que nuestro nuevo protagonista estará
dispuesto a defender a los suyos.
Y hablando de nuestro
protagonista, Arthur es un personaje complejo, con sus propias inseguridades,
sus puntos débiles detrás de esa fachada de director respetable pero sobre
todo, con un corazón tan grande que me sorprende que le quepa en el pecho. También
volveremos a ver a Linus, a los niños, más un integrante nuevo que se integrará
a la pandilla. A todos me los comí a besos, en especial, porque en esta ocasión
los veremos protegerse los unos a los otros, defendiéndose de personas que son
verdaderos villanos, dos mujeres a las que nos darán ganas de retorcerles el pescuezo
o bien, de arrojarlas al mar con un yunque atado al tobillo.
Y la trama…aquí es
donde voy a detenerme. Porque este libro no solo ha calado en mis sentimientos,
sino en mi forma de percibir al colectivo LGBT+Q, si bien el autor no expresa
de manera textual que habla de elles.
No obstante, antes de
zambullirme en mi experiencia al respecto, me gustaría ponerlos un poco en
contexto. Antes de leer esta obra, yo no comprendía por qué el colectivo LGBT+Q
parece estar empeñado en que se les llame y reconozca por todas estas
denominaciones que existen para referirse a elles, comenzando por este mismo
pronombre. Y ojo aquí: no tengo nada en contra de estas personas, tengo amigos
y amigas que pertenecen al colectivo, a mí me gustan los hombres y las mujeres,
pero nunca me he sentido identificada con la palabra bisexual. El caso es, que
yo no entendía cómo a alguien le puede gustar que le asignen una etiqueta, más
que nada, porque a mí, como persona con una discapacidad, las etiquetas que han
surgido a lo largo de los años para referirse a nosotros me han acarreado más
problemas que beneficios. O la gente me consideraba inútil, o contagiosa o
súper poderosa y, aunque este último pareciera ser un término que no hace daño
a nadie, lo cierto es que sí que lo hace, sobre todo, porque cuando la gente descubre
que una no sabe derrotar a alguien con golpes karatekas sin verlo, entonces se
molesta y te acusan de ser una mentirosa, como si uno les hubiera dicho a los
autores / directores de todos esos libros y películas que los ciegos podemos
madrearnos a alguien y salir sin un solo rasguño.
Pero al terminar este
libro y, más específicamente, tras leer el discurso que da Arthur, comprendí
que para las personas del colectivo LGBT+Q las palabras sí que son importantes.
Porque vivimos en un mundo en donde las cosas y personas que realmente valen
tienen que encajar en determinada denominación, caber perfectamente en una
cajita con paredes bien delimitadas (persona normal, persona heterosexual, etc.).
De lo contrario, no formas parte de este mundo, de esta sociedad. Sin contar
con el hecho de que estas etiquetas las han escogido elles, y no solo eso, son
parte de su identidad, de eso que los empodera. Y al menos en lo que a mí
respecta, esto es suficiente para llamarlos por esas denominaciones, aunque
todavía estoy aprendiendo al respecto.
Lo mejor sería que todo
el mundo nos identificáramos y respetáramos por ser seres humanos, pero por
desgracia, no es así. Sin embargo, gracias a libros como este podemos ampliar
nuestra propia visión de las cosas, volviéndonos personas más empáticas, sensibles
y respetuosas. Sé que para mucha gente el colectivo LGBT+Q es el enemigo, y en
parte, entiendo por qué piensan así: al menos en mi ciudad, hay miembros de
este colectivo que se están yendo al extremo, discriminando y hasta agrediendo
a las personas hetero (tuve un paciente a quien personas del colectivo le
lanzaron huevos podridos nada más porque iba saliendo del registro civil con su
esposa), lo cual, tampoco está bien. Si queremos que se nos respete, debemos
poner el ejemplo, recordando que la violencia solo genera más violencia.
Creo que libros como
los de T.J. Klune deberían de ser recomendados a puñados, promovidos en los
últimos grados de bachillerato y, en general, darle la vuelta al planeta,
porque pienso que si lo hicieran, el mundo sería un lugar mejor.
Así que nada, leamos y
recomendemos estos libros, ya no solo porque son una delicia leerlos, sino
porque nos ayudarán a ser mejores personas.
¿Y ustedes? ¿Qué libros
de este autor me recomiendan? ¡Tecleen!
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